Presento hoy una historia de aquellas que a uno le llegan
pero ya no sabe desde dónde, y a la cual le agregamos nuestra pincelada
La misma cuenta que una vez un perro paseando por la calle
se encontró frente a una casa abandonada, lleno de curiosidad ingresó moviendo
su cola y contento. Dentro de la casa muchos perros lo recibieron de igual
manera, ladrándole y moviendo sus colas. Nuestro personaje salió nuevamente a
la calle mucho más contento de lo que había ingresado.
Al rato otro perro ve la misma casa y entra en ella, en esta
ocasión solo recibe señas de agresión de los otros perros, a quienes ve gruñendo
y adoptando una posición de ataque hacia
él. Cuando se va sale mucho más enojado que al ingresar.
La pregunta que nos surge es el por qué de estas dos
actitudes recibidas por los actores de este cuento: La respuesta se encuentra
al saber qué había dentro de la casa abandonada… tan solo espejos!
Cada uno de estos dos perros vio reflejada su actitud frente
a una gran cantidad de espejos, aunque
solo se hallaba frente a si mismo!
Trasladando esta linda historia a nuestro diario vivir nos
hace pensar en nuestro comportamiento y ver que solo recibimos aquello que
damos, si entregamos alegría recibiremos más de ella pero si lo que ofrecemos es
mal humor el mismo nos regresará
multiplicado!
Hasta la próxima!
Prof. Lic. Fernando Julio Silva, MSc.
Febrero 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario