Les presento el caso de
una emprendedora quien a partir del nacimiento de una nieta vislumbró un nicho de
mercado impensado e insatisfecho creando "Mejor Postura" ( www.mejorpostura.com.ar/)
Hoy en día la empresa
cuenta con ocho años de vida, al igual que la nieta
Vale la pena leerlo
Hasta la próxima
Prof. Lic. Fernando
Julio Silva, MSc
Julio 2012
Artículo:
Emprendedores:
una 'Mejor Postura' con certificación de calidad de los que saben
04-05-12 Cuando nació
su primera nieta, Irene Tomadoni vio la oportunidad y con solo $ 6 mil creó lo
que es hoy un ícono en almohadones para lactancia.
En el mismo momento en
que su primera nieta se gestaba en la panza de su nuera, Irene Tomadoni creaba
su propia firma de almohadones para lactancia. A su nieta la bautizaron Franca
y a su emprendimiento ‘Mejor Postura’.
“La idea surgió por casualidad, mi nuera
Mariana estaba embarazada y vino una amiga de Alemania con un almohadón hecho
con microperlas de poliestireno expandido (EPS). El almohadón le llamó mucho la
atención, resultó muy cómodo y no había nada parecido en el país”, rememora.
Fue entonces que junto
con su nuera, licenciada en marketing , armaron un plan de negocios, juntaron $
6 mil para poder empezar e importaron el material necesario para comenzar la
producción.
El primer almohadón lo
probaron en familia. La pequeña Franca hizo los honores, y como se dice cuando
nace un niño, la pequeña vino con un “pan bajo el brazo” y también con muchos
almohadones para vender, ya que en la propia clínica dónde nació las enfermeras
de la nursery quedaron fascinadas con el producto.
Irene recuerda que fue
el Sanatorio de la Trinidad el primero en hacer un pedido de 15 almohadones,
utilizados por el servicio de neonatología y puericultura para ayudar a las
madres a amamantar.
Al poco tiempo, el boca
a boca se transformó en el mayor aliado de esta emprendedora. En diálogo con
Cronista.com, cuenta que cada madre que aprendía en la clínica a dar de
amamantar a su hijo con estos almohadones quería uno para llevarse a su casa.
Fue así que cada vez más clínicas los sumaron como material de uso diario y los
productos se fueron posicionando en las tiendas de regalo de las mayores
nurserys del país.
"Las mamás
conocían el almohadón en la clínica, les resultaba tan práctico que al irse lo
compraban en la tienda de la misma clínica", rememora.
El crecimiento de la
firma tuvo dos claves: "Una fue la convicción por generar productos de
altísima calidad.
Tanto los almohadones, como el resto de los productos,
emplean los mejores materiales en su producción.
Son ergonómicos,
hipoalergénicos, no tóxicos, térmicos, aislantes, lavables e ignífugos. Y se
diseñan pensando una y mil veces tanto en las necesidades funcionales como en
la salud de sus usuarios”, afirma Irene y precisa que otro punto clave fue
“prestar especial atención a las sugerencias de cada uno de los profesionales
que los emplean, mejorando los productos de manera continua”.
Así la firma buscó
aliados de prestigio. La marca logró el aval de Fundacion de Lactancia y
Maternidad (Fundalam), el Sanatorio Trinidad, Otamendi, el Hospital Austral, la
maternidad Suizo Argentina, el Cemic y la Maternidad Sardá, entre otros.
“Esto fue una especie de certificación. Le dio
al comprador, la mamá, la confianza sobre el producto”, subrayó.
Un
camino con piedras y perlas
Hoy la firma 'Mejor
Postura' tiene un nombre y un prestigio que no llegó de la nada ni se hizo
solo. Irene recuerda que los comienzos fueron tiempos de prueba y error. Fue
utilizar tergopol para suplantar las microperlas y darse cuenta que el producto
no era el mismo, que era necesario exportar esa materia prima desde Alemania.
“Tuvimos que ver como bajar costos, encontrar los
materiales correctos, conectarnos con gente que nos explicará como importarlos.
Queríamos que fuera igual a ese almohadón alemán original. Esa era la prueba de
fuego y después ver como comercializarlo”, cuenta.
Hoy a ese aval que le
dio el escuchar a los que sabían hace que la marca esté presente en las charlas
y reuniones sobre lactancia de las principales clínicas en el país y que
puericultoras lo recomienden para los primeros contactos entre mamás y bebés.
La línea se fue
ampliando y sumaron almohadones de postura cervical, de viaje, medialunas y
demás productos posturales para bebés y grandes. Por ahora prefieren vender en
la Argentina, sin exportar, pero si cubriendo todo el país.
Irene reconoce que hoy
una empresa no funciona como hace 10 o 15 años. "Hay otras herramientas y
que hay que adoptarlas, como es el caso de la web, Facebook y Twitter que
permite interactuar con los clientes", señala.
Lo que nació como una
empresa muy ligada a la familia lo sigue siendo. A su nuera Mariana, se suma su
hija Gabriela y los nietos, que ya son tres con Gala y Marco, son los modelos y
primeros en probar los productos.
La traba a las
importaciones puso a esta emprendedora en alerta, pero tras un bache que se
produjo entre diciembre y enero el ingreso de microperlas desde Alemania parece
volver a la normalidad.
Irene no se detiene.
Ahora busca que otras mujeres se sumen a su proyecto como revendedoras por
catálogo. “Las mujeres no nos aburrimos nunca. Siempre buscamos cosas”, se rie.
Hoy Franca tiene 8 años
de vida al igual que 'Mejor Postura' y ya no es un emprendimiento más, es una
firma con nombre propio y prestigio